jueves, 2 de diciembre de 2010

NUEVO DISCO

Pequeño es el título del primer álbum en solitario de Dani Martín.

"16 añitos fiera, me creía el rey del mundo con mi lema por bandera: lo que digan, yo no escucho". Así comienza Dani Martín cantando en el primer single, acompañado sólo con piano.

"16 añitos es el resumen del disco y habla de la cantidad de impedimentos que nos ponemos para ser nosotros mismos a lo largo de la vida", dice Dani Martín. "Cuando somos pequeños, parece que lo más importante es ser el más fuerte y dejamos de lado otros aspectos como la sensibilidad. Hasta mi adolescencia, he tenido esta sensibilidad un poco oculta, escondiendo el afecto al salir de casa porque la pandilla marca que hay que ser fuerte por encima de todo, y luego la pandilla se convierte en oficinas, en jerarquías, etc., pudiéndolo trasladar a las diferentes etapas de la vida".

16 añitos es un medio tiempo rítmico que se sostiene con piano, guitarras acústicas y órgano Hammond, y la voz de Dani desgranando frases como "No había nadie que pudiera lograr que cambiara un poco el rumbo", "Y así fue, me rebelé contra todo hasta el sol", "Me enfadé con el mundo, malditos complejos que siempre sacan lo peor", "Me disfracé de uno que no era yo", "Buscando esa firmeza llegué a un lugar negro y pensé que eso era el valor", "Y sufrí de tal manera por dejar de ser quien era", "Los valientes son los que son de verdad, ni los fuertes ni sus guerras. Los valientes son los que saben llorar con la cara descubierta" o "Es mirarme ahora a la cara y ser quien soy".

Un disco de carácter autobiográfico que, según Dani Martín, "es una vista atrás hasta hoy, cuando me siento a gusto de ser lo que realmente soy. El álbum habla de los roles que nos colocan y que no nos pertenecen: el alto, el guapo, el bajito, el fuerte, el débil... A veces acarreamos con ellos toda nuestra vida y en el disco hablo de la rebelión necesaria contra estos papeles que nos imponen". Pequeño es un disco autobiográfico pero "habla de todas las personas", continúa Dani Martín. "A todos nos ha tocado vivir con estos roles y por eso no habla solamente de mí, sino de todos, de la realidad de la vida, de que no por ser el pequeño o el menos fuerte se es el menos valioso o el menos importante".

El álbum se ha grabado en los Estudios Montepríncipe de Madrid y está producido por Bori Alarcón, Dani Martín e Iñaki García. Contiene 12 canciones compuestas por Dani Martín (en "La verdad" ayuda Iñaki García en la música) y entre los músicos que han tocado están Carlos Raya (guitarras acústicas y eléctricas), Iñaki García (piano, teclados y Hammond), Manolo Mejías (bajo), Carlos Gamón (batería y percusión), Coque Malla, Miguel Malla... "Llevo trabajando en las canciones hace más de dos años", dice Dani Martín. "Componiendo, grabando ideas, maquetas en mi estudio. No tenía claro que iba a hacer con ello y cuando vino el parón de El Canto del Loco me decidí. Ha sido un proceso maravilloso. Me puse a trabajar con Bori Alarcón y toda la gente ha ido llegando al disco de manera espontánea y así sigue ahora que estamos preparando la gira. Estamos muy contentos".

La orquestación corre a cargo de Miguel Ángel Collado y el disco se ha masterizado en Maine (Boston, Estados Unidos) por Bob Ludwig (Dire Straits, Radiohead, Jimi Hendrix, Madonna, Eric Clapton, Rolling Stones, David Bowie, Nirvana, Bruce Springsteen, U2).

"Pequeño no significa la ruptura de El Canto del Loco", afirma con contundencia. "Estas canciones no podía ponerlas en boca de la banda porque son muy personales, muy mías".

"Este disco es mi vida entera, es mi sangre y mis sentimientos; los viví yo solo", escribe Dani Martín en los créditos.

Pequeño comienza con el primer single 16 añitos, que tiene un vídeo dirigido por Nahuel Lerena que nos muestra a Dani Martín recorriendo las diferentes localizaciones que sirven de marco para la realización del cortometraje "La vida de pequeño", mientras recuerda la historia que se está narrando y comparte momentos Nicasio Galán, el actor que protagoniza el corto y el vídeo. Ambos se rodaron en Argentina, en Ciudad Jardín, en una fábrica abandonada del barrio porteño de Avellaneda del Gran Buenos Aires. De esta fábrica salían las viejas y desaparecidas neveras Siam, marca líder en los años 60 en Argentina.

"El proyecto de La vida de pequeño es un cortometraje de 20 minutos que narra la historia de un niño de 10 años al que sus padres llaman Pequeño", dice el director Nahuel Lerena, que comparte la realización del cortometraje con Patricia Byrne. "Pequeño se muda a un nuevo barrio y arma una pandilla con cuatro amigos. A lo largo del corto vamos viendo las diferentes situaciones que atraviesan estos cinco niños contadas desde el punto de vista de Pequeño, un chaval de gran sensibilidad. La historia está narrada en primera persona con voz en off y está acompañada por cuatro canciones del disco".

Un disco que continúa con Mira la vida ("Mira la vida como vuelve y te sorprende; mira en la vida qué fondo tiene el cajón; mira la vida que regala todas las flores que tiene, aunque algunas las arranque con dolor"), tranquila canción, estribillo clásico, y arreglos de cuerda escritos por el propio Dani Martin y ejecutados por Miguel Ángel Collado que recorren buena parte del álbum. Después llega Mi lamento ("Siempre pienso aunque estés lejos y te juro que te puedo notar. Cerca quedarán tus gestos y tu carita de princesa, mi hermana"), una balada intensa y dolorosa que comienza solo a voz y piano y crece con energía.

Eres ("Eres ese caramelo que quería, eres ese gesto de valor, eres como la primera parte de mi vida, tan salvaje, tan amor, tan extrema como yo") enseña la guitarra de Carlos Raya que marca la canción junto al piano en otro medio tiempo enérgico. La verdad ("Solo, quiero pensar que en la vida todo cambia. Quiero crecer y contigo saldrá bien. Quiero llegar a sentir con todo el alma. Gracias vida por tus armas, voy a aprender a usarlas bien") también comienza con piano en otra muestra de serenidad en la composición, mientras Los valientes de la pandilla ("Aunque no creas tú, yo era alguien con miedo, el que menos podía, el que todo temía. Siempre fui el más pequeño, puede que como tú. Yo me sentía el que menos, el débil, frágil, cobarde. El que no pedía a nadie cuando echaban a dedos") incorpora la guitarra de Coque Malla para animar el álbum con cierto toque fronterizo con sonidos de acordeón y ambiente a música de los 60 en algunos pasajes.

La línea ("Solo, cómo duele no gustarse ni en sueños, vulnerable a cualquier situación. Una cárcel, tú viviendo allí dentro. El preso, carcelero y prisión") comienza con valentía con un piano esencial y sencillo y cuerda para arropar la voz de Dani. Después se incorpora la sección de ritmo, sitúa la canción en lo más alto y la intimidad vuelve al final. El puzzle ("Sois todo lo que tengo mi tesoro mas preciado, sois lo único que es cierto soís mi suelo y mi tejado, sois caricia y sois talento, sois la critica que guardo, sois lo que os ha dado el tiempo sois lección de amor y os amo") contrasta con una envoltura musical más intensa, marcada por las guitarras eléctricas y Tres encantos ("Tengo tres encantos solo en mí y no los quiero dar así. Voy a cuidarlos tanto ya, no son regalos, son algo más y no los quiero dar asi, sólo a ti. Voy a mirar a quién invito ahora a pasar, a quién escucho, a quién no hablar, que ya me han arrancado bastante") se acerca al soul con el apoyo del saxo de Miguel Malla en otra canción que bucea en el interior.

En la recta final del álbum llega la canción que le da título. Pequeño ("Solo, y en esta vida que nos da a cada uno ese lugar que a veces no es el que uno quiere y que te aparta de tu verdad, porque alguien quiso colocarte en el hueco donde pierdes") se adorna con guitarras trémolo para un tema más que lento, con humo de blues y que va creciendo, mientras Lo que nace se apaga ("Y verás que lo que nace se apaga; que de ser todo eres nada; es la maldita verdad. Llegará, todo lo bueno se acaba y ahora el silencio acompaña mucho más de lo normal. Todo es mentira, pasamos de rey a mitad, somos la tinta de un libro que llega a un final y está escrito ya") vuelve a arriesgar con un comienzo atípico a piano y Hammond para llegar a otro estribillo con mayor pulso rítmico. Con la aparición del slide-guitar de Carlos Raya. Y para cerrar, El cielo de los perros ("Que para mí eres un trozo de mi vida que me arrancaron sin pedírmelo y deprisa. No pude darte tantos besos, más caricias, no pude dártelo. La más bonita era mi amor, la sonrisa de una flor, así era. Y tu mirada azul nos dio pocos dias pero ¡qué grandeza! ¡qué grandeza!"), que resume el carácter del álbum con tranquila serenidad, envuelta por el clasicismo de las cuerdas y el piano y con Dani Martín recitando en el final: "La vida no espera ni se hace tu amiga. La vida es lo único que manda en la vida. La vida no es tuya, ni tuya ni mía".

"Esta es una aventura que llevaba dentro desde hace mucho tiempo y que ha salido cuando tenía que salir", escribe Dani Martín en el libreto del álbum.

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